Consejos para emprender un negocio mientras estudias
Cualquier momento puede ser bueno para emprender si realmente estamos convencidos y queremos dedicarnos a ello en cuerpo y alma. Si bien es verdad, que cuando compaginamos el emprendimiento con otra actividad, ya sea estudiar o mantener nuestro trabajo actual, supone un esfuerzo extra. Para ello, definir bien las prioridades y organizarnos bien será clave.
Principales consejos para emprender a la vez que estudias
Hay personas que tienen vocación de emprender pero el hecho de estar en la universidad todavía finalizando sus estudios creen que les limita. Hay otras que quieren tener una fuente de ingresos adicional pero los horarios de un trabajo, ni que sea de media jornada, hacen que les sea muy complicado compatibilizarlo con los estudios.
Veamos los siguientes consejos que hemos recopilado si este es tu caso:
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Organízate y prioriza:
Definir unas prioridades claras y realistas es la base para poder compaginar ambas actividades. Depende de si estás iniciando tus estudios o si ya estás en cursos más avanzados podrás organizarte con más o menos flexibilidad. También dependerá de los estudios que estés realizando pero lo importante es definir si quieres mantener la fecha de finalización de tus estudios o si la quieres retrasar un poco para poder disponer de más tiempo para emprender. Sea cual sea la opción que elijas, es importante que lo mantengas de forma consecuente para cumplir la opción que te has propuesto.
Con las prioridades claras, el siguiente elemento clave es la organización. Define el tiempo necesario para dedicar a los estudios y el necesario para la empresa. Intenta ser constante en ello y respeta lo que hayas establecido para que una parte no afecte a la otra.
Anticípate en momentos en los que necesites poner más foco a una de las partes. Por ejemplo, en época de exámenes, anticípate para que la parte de la empresa la tengas lo más bien cubierta posible.
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Céntrate en qué necesidad quieres resolver:
A la hora de emprender es muy importante detectar una necesidad y desarrollar un producto o servicio que la solucione. Centrarse en esa idea y no perder el foco es clave, especialmente cuando disponemos de poco tiempo ya que a la vez estamos estudiando.
Empieza pequeño, testea el mercado y céntrate en la parte esencial de esa necesidad que has detectado. Cualquier paso que te separe de ese objetivo, apártalo y recupera el foco.
Cárgate de perseverancia: emprender es una vocación, es muy gratificante pero requiere esfuerzo. Por ello perseverar, remontarse cuando encontremos obstáculos y seguir adelante serán claves.
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Innova:
Ofrecer soluciones novedosas siempre es un valor añadido. Por ello, investiga propuestas de valor que tengan una ventaja competitiva. Al innovar, no tengas miedo en iterar y evolucionar tus ideas de acuerdo con el feedback que recibas del mercado.
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Mide los resultados obtenidos:
Márcate objetivos y KPIs para saber si la idea y el modelo de negocio que están llevando a cabo tiene sentido y vas por buen camino.
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Ayudas para emprendedores:
Infórmate sobre ayudas económicas o de otro tipo a las que puedas acceder especialmente por ser joven emprendedor. También hay otras ayudas a las que puedes acceder como ayudas a la innovación, ayudas a empresas de base tecnológica, ayudas a mujeres emprendedoras, etc.
Aprovecha las ventajas de montar tu negocio mientras estudias
Más allá de los consejos que acabamos de mencionar, también hay otros aspectos muy positivos y sinergias de emprender mientras estudias que tienes que asegurarte no pasar por alto.
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Aprovecha tu tiempo en la universidad:
La universidad te ofrece muchas herramientas tanto personales como profesionales que seguro que te beneficiarán en el emprendimiento. Asiste a todas tus clases ya que, aparte de ser necesario para completar tus estudios, adquirirás conocimientos que te serán útiles para tu negocio en construcción.
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Conoce tus fortalezas y debilidades:
El hecho de estudiar nos ayuda a desarrollarnos como profesionales y como personas. También nos ayuda a conocernos mejor. Por ello, aprovecha tus fortalezas para llevar a cabo tu negocio y rodéate de gente que pueda ayudarte en las áreas en las que necesitas apoyo.
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Relaciona tus estudios con el negocio:
Si existe una relación entre tus estudios y la empresa que estás creando aprovecha las sinergias. Por ejemplo, realizar las actividades prácticas sobre tu empresa. De este modo, no solo ganarás tiempo sino que, mucho más importante, pondrás en práctica lo que estás estudiando.
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Aprovecha el ecosistema:
En la universidad o el centro de estudios tienes a tu alcance mucha gente diferente, docentes, investigadores. Rodéate de gente que te ayude a validar las ideas que tienes, a desarrollar aspectos en los que te falta conocimiento o experiencia. Estás en un entorno innovador, aprovecha para contagiarte de este entorno, buscar soluciones creativas, detectar oportunidades, etc.
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Utiliza el networking:
Fortalece tu círculo de modo que te ayude a crecer. Estudiar a la vez que emprendes es una gran oportunidad para conocer a gente
¿Estás montando tu propio negocio? ¿Qué otros consejos añadirías a la lista?
Anna Mercadé