Hábitos y rutinas
Según R. Dreikurs, psiquiatra y educador estadounidense, “la rutina diaria es para los niños lo que las paredes son para una casa, les da fronteras y dimensión a la vida. La rutina da una sensación de seguridad. La rutina establecida da un sentido de orden del cual nace la libertad”.
Entendemos por rutina aquella acción que hacemos mecánicamente, por ejemplo: colgar la chaqueta en el colgador de clase. En cambio, un hábito es una manera de actuar que llevamos a cabo para satisfacer nuestras rutinas, es un mecanismo que crea destrezas que además, podremos extrapolar a otros ámbitos. Por ejemplo: abrocharse la chaqueta.
La finalidad de la Educación Infantil es contribuir al desarrollo afectivo, social, intelectual y físico de los niños. Los niños deben asimilar normas y pautas de conducta para poder convivir en sociedad. Los hábitos forman parte de la personalidad del niño y le identifican con el grupo social en el que han crecido, con sus valores y su cultura. Adquirir buenos hábitos durante esta etapa, les convertirá en personas más seguras y con mayor nivel de autonomía y autoestima.
Pero, ¿cuándo y cómo crear hábitos y rutinas en los niños?
– Hay que empezar en cuanto antes para ir acostumbrando a los pequeños a ser autónomos lo antes posibles.
– Es interesante marcar un horario e intentar respetarlo a diario. Anticiparse a lo que pasará proporciona seguridad y confianza en el niño.
– Cualquier momento es el adecuado para crear hábitos: al despertarse, a la hora de comer, de dormir, de llegar de la escuela, etc.
– Es importante predicar con el ejemplo. Los niños suelen copiar lo que ven.
– Trata de dar consignas claras y asegurarte de que el niño las ha entendido.
– Hay que reforzar positivamente los logros observados para motivar a los niños a seguir esforzándose.
– Familia y escuela deben colaborar y comunicarse para asegurar la coherencia y eficacia en el proceso.
– Ten en cuenta el nivel de desarrollo que tiene el niño.
Escrito por Laura López Mera