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Test de tramitación procesal: ¡supéralo con éxito!

Oposiciones Tramitación Procesal
Test de tramitación procesal: ¡supéralo con éxito!

¿Buscas un proceso de empleo público asequible que te reporte buenos salarios? Entonces los exámenes de tramitación procesal— dos test y una prueba práctica— son tu camino. 

En este cuerpo de la Administración de Justicia disfrutarás de un horario ventajoso y de un sueldo de más de 12.000 euros anuales. En CEAC te formamos para que lo apruebes con nuestro programa para las Oposiciones de Tramitación Procesal, en el que dispondrás de todas las herramientas para marcar siempre la respuesta acertada de los cuestionarios. ¡Veámoslos en detalle!

Examen de tramitación procesal: ¿qué test se realizan?

No hay mayor estabilidad que la que pueden reportarte unas oposiciones. Sin embargo, alcanzarlas requiere un pequeño esfuerzo: aprobar las evaluaciones que se marcan en la convocatoria. 

En el caso que nos ocupa, hablamos de un total de tres ejercicios, dos de los cuales se plantean en forma de cuestionario. Es decir, que se te indicará una pregunta y tendrás que escoger la afirmación verdadera o falsa (según se te pida) entre una serie de opciones.

El primer test de tramitación procesal con el que te encontrarás el día del examen abarca el grueso del temario para comprobar tus conocimientos sobre el mismo. Es el más largo y para el que dispondrás de una mayor cantidad de tiempo. 

Uno de los test se centra en la teoría y el otro se basa en un supuesto práctico

El segundo, por su parte, se enfoca en los epígrafes que tienen una temática procesal más marcada. Su objetivo es comprobar que eres capaz de aplicar la teoría y que conoces los plazos y procedimientos de un caso que podría suceder en la realidad.

Primer ejercicio

Las pruebas de tramitación procesal se abren con un test de 100 preguntas y cuatro opciones de respuesta disponibles. El tiempo que se deja para contestarlas es de 90 minutos, lo que significa que tendrás menos de 1 minuto para leer y marcar cada enunciado. 

El tiempo es un aspecto muy importante para salir airoso de este ejercicio, pero también la lectura atenta y la gestión de los nervios. Recuerda que solo una de las respuestas será la válida— es decir, no habrá contestaciones múltiples— y deja margen para completar las 4 preguntas que propone el tribunal como reserva en caso de anulación.

¿Cómo se valora?

La mayor puntuación que podrás conseguir en este test de tramitación procesal serán 60 puntos. Cada pregunta que falles le restará 0,15 a tu nota, pero la que dejes en blanco no te penalizará. 

En caso de duda, por lo tanto, puedes decidir no responder sin que te perjudique. Eso sí, te aconsejamos que hagas un poco de matemáticas antes y compruebes que, acertando las preguntas que tienes “seguras”, alcanzas al menos la nota mínima: el 60% de los puntos que pueden llegarse a alcanzar. En caso contrario, no se te corregirá el segundo ejercicio.

Segundo ejercicio: el caso práctico

Es posible considerar el supuesto práctico como otro de los cuestionarios de este proceso selectivo. De hecho, se hace el mismo día que el primero, justo tras él, aunque el tiempo para completarlo es menor. 

En cierto modo, su formato es especial, porque parte de un caso realista que se expone en detalle. A continuación, se le plantean al candidato 20 preguntas más dos de reserva, en las que se le interroga sobre el modo en el que debería proceder el tramitador desde el ejercicio de su puesto. 

Calificación de la prueba

En comparación con el test de 100 preguntas, el Tribunal se muestra un poco más severo al valorar esta prueba. Los fallos descuentan más— 0,40— aunque las que estén en blanco siguen sin ser penalizables. 

Con cada acierto, lograrás un punto. Recuerda que tu nota final será la suma del resultado que hayas conseguido en cada una de las evaluaciones, así que deberás intentar dar lo mejor de ti. Tu meta mínima si quieres continuar en el proceso debe ser el 60% de los puntos que pueden obtenerse en este examen.

Consejos para aprobar el test de tramitación procesal

Si superas los dos test de tramitación procesal, ya tendrás gran parte del camino hecho. Tras ellos solo debes superar una prueba de textos con Word, que puede tener carácter teórico o práctico.

Como no se te evaluará el siguiente examen sin haber aprobado el anterior, te recomendamos que empapes bien tu mente en los contenidos legislativos. No te olvides de practicar con cuestionarios de otras convocatorias y de apuntar los consejos que te dejamos para que resuelvas el examen lo mejor posible.

  • Lee con atención: parece básico, pero un alto porcentaje de los errores se debe a una mala lectura. Asegúrate de entender bien el enunciado antes de contestar.
  • Trabaja la memoria visual: la literalidad es muy importante en los test de tramitación procesal. Repasa una y otra vez el temario y no tengas miedo de acudir a la ley para consultar las fuentes originales.
  • Apunta los plazos: una de las cosas más frustrantes de la oposición es el gran número de tiempos que existen en Justicia. A medida que estudias, vete agrupando los plazos en función de su cantidad de días.
  • Acude a un centro: muchas veces, de la experiencia puede aprenderse más que de cualquier libro. Un cuadro docente que conozca el funcionamiento de las oposiciones de tramitación procesal podrá orientarte y hacer que tu aprendizaje sea más asequible.

¡Únete al Cuerpo de Tramitación Procesal!

Todos los test de tramitación procesal son eliminatorios. Por eso es importante que te prepares adecuadamente para ellos con un centro especializado

En CEAC contamos con una experiencia formativa de más de 75 años, a la que hemos recurrido para desarrollar nuestro Método Avanza para oposiciones. Disfruta de una formación flexible con contenidos actualizados y de un plan de estudios hecho a tu medida por el equipo de asesoramiento académico. Tendrás todo el apoyo y los ejercicios que necesitas para superar este proceso de empleo público y acceder al sueldo de tramitación procesal. ¡Apúntate y consigue tu plaza!

alicia pardo autor

Alicia Pardo Crego

Periodista graduada en la Facultad de Ciencias de la Comunicación de Santiago de Compostela. En su trayectoria, ha pasado por medios como La Voz de Galicia y La Opinión de A Coruña, y ha elaborado material institucional en Ártabra Comunicación.
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