Pruebas físicas para un funcionario de prisiones
¿Has decidido dar el paso y prepararte para superar la Oposición de Ayudante Penitenciario y no tienes del todo claro en qué consisten las Pruebas Físicas? ¡Estás de suerte! En este artículo te contamos todo lo que necesitas saber sobre las pruebas físicas.
Los procesos selectivos para acceder a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado suelen ser muy exigentes. Por eso, en CEAC Oposiciones, no solo te preparamos para las oposiciones, sino que también te brindamos una educación completa y personalizada. Nuestro centro especializado a distancia para oposiciones de ayudante de instituciones penitenciarias se distingue por su enfoque detallado y exhaustivo mediante el Método Avanza, garantizando tu éxito en cada etapa del proceso.
¿Hay pruebas físicas para funcionario de prisiones?
Para obtener tu plaza fija como Ayudante de Instituciones Penitenciarias tendrás que superar una oposición formada por tres ejercicios, dos teórico-prácticos y uno físico. ¡Pero no son pruebas físicas como tal!
No hace falta que tengas una exhaustiva rutina de entrenamiento: las pruebas físicas para este cuerpo de funcionarios consisten en superar unas pruebas de aptitud médica que medirán tu estado de salud general.
Las pruebas de aptitud médica forman parte del proceso selectivo para formar parte del funcionariado de prisiones. En el siguiente apartado te contamos en qué consisten. ¡Sigue leyendo!
¿En qué consisten las pruebas médicas para ser funcionario de prisiones?
El proceso de selección y valoración de los/as aspirantes a superar la oposición, lo forman tres ejercicios. El primero, un cuestionario de 150 preguntas con respuesta múltiple. El segundo, la resolución de supuestos de carácter práctico. Y el tercero, la razón de este artículo: la prueba de aptitud médica. Pero, ¿qué te encontrarás en ellas?
Este examen, a diferencia de otras oposiciones vinculadas con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, no implica la superación de exigentes ejercicios físicos con los que medir la condición física del candidato. Sino que se trata de un reconocimiento médico formado por las siguientes pruebas:
- Analítica de sangre y orina, con la que poder detectar grados abusivos de consumo de alcohol o sustancias tóxicas. Si se está bajo tratamiento médico, hay que indicarlo antes del ejercicio, ya que los efectos secundarios pueden alterar el estado habitual de la sangre u orina.
- Control de audiometría, con una sencilla prueba en la que el/la candidato/a está dentro de una cabina aislado del ruido exterior con unos cascos y tendrá que reaccionar cada vez que escuche pitidos. Esta prueba mide la capacidad de reacción ante las vibraciones.
- Pruebas de agilidad y agudeza visual, en las que siguiendo un procedimiento rutinario, similar al de una revisión en el oculista, se deben identificar a cierta distancia una serie de símbolos que van modificando su tamaño.
- Toma de peso y altura, con la que valorar que los valores de IMC responden a patrones saludables y no se tiene ninguna patología que deba ser tratada.
- Electrocardiograma. Suele ser una de las pruebas que más temor suscita, pero en ella simplemente se miden las alteraciones cardiacas colocando unos electrodos en el pecho que registran las señales del corazón.
- Espirometría. Con esta prueba se mide la capacidad pulmonar, y para ello el/la candidato/a debe soplar de forma continuada a través de una boquilla.
- Entrevista personal con el médico. Es en esta valoración final donde el profesional médico resume los resultados de las pruebas anteriores y realizará las exploraciones y pruebas a mayores que considere oportunas en base a los resultados. También realizará una serie de preguntas sobre operaciones o patologías previas.
Todas las pruebas se realizan bajo la supervisión del personal médico facultativo de la Administración del Estado, designado previamente por el Tribunal. Para ellas no hay un número fijo de sesiones o tiempo determinado, sino que se realizarán en cuantas sesiones considere el Tribunal que sean necesarias.
Este tercer ejercicio será calificado como «Apto/Apta» o «No Apto/No Apta», siendo necesario obtener la calificación de «Apto/Apta» para poder superar esta prueba, ¡y la oposición!
El resultado de este ejercicio tiene como objetivo comprobar presencial y objetivamente que no se tiene ninguna de las exclusiones médicas indicadas en la convocatoria. Pero, ¿qué quiere decir esto? En el siguiente apartado te lo contamos.
Las exclusiones médicas para Instituciones Penitenciarias, al detalle
Antes de empezar tu preparación para formar parte del Cuerpo de Instituciones Penitenciarias, deberás tener en cuenta que en las pruebas médicas hay una serie de exclusiones que dificultan la obtención de un “Apto” en la valoración médica. El Ministerio de Interior actualiza constantemente los requisitos de exclusión, pueden ser complicados de comprender a primera vista pero, ¡no te preocupes! En CEAC te contamos cómo es el cuadro de exclusiones que impide acceder a este Cuerpo:
- Capacidad y agudeza visual, que establece como norma que la agudeza visual – sin gafas o lentillas – debe ser superior a 0.33. Personas que padezcan desprendimiento de retina o retinosis pigmentaria, diplopía, estrabismo, glaucoma, hemianopsia, subluxación del cristalino, afaquia, distrofia corneal con disminución de la agudeza visual, queratitis crónica, hemeralopia.
- Capacidad auditiva, impidiendo que personas con sordera completa en ambos oídos o incompleta permanente accedan al Cuerpo. La agudeza auditiva no podrá ser inferior a 35 decibelios.
- Limitaciones en el aparato locomotor como lesiones o malformaciones que incapaciten o disminuyan la agilidad básica, escoliosis limitante o hernia discal.
- Patologías en el sistema endocrino como un IMC (Índice de Masa Corporal) inferior a 18 – delgadez extrema – o un IMC superior a 34 – obesidad. Las enfermedades vinculadas con el sistema endocrino-metabólico pueden estar sujetas al criterio médico.
- Enfermedades en el aparato digestivo como cirrosis hepática, enfermedad inflamatoria intestinal crónica o pancreatitis crónica.
- Padecer insuficiencia renal crónica.
- Limitaciones en el aparato cardiovascular entre las que se incluye insuficiencia cardiaca, haber padecido infarto de miocardio o coronariopatía, arritmias, poseer valvulopatías y prótesis valvulares, aneurismas de grandes vasos o insuficiencias venosas periféricas, con signos de alteraciones tróficas y varicosas.
- Dificultades respiratorias derivadas de enfermedades neumológicas; una capacidad ventilatoria inferior al 80% será motivo de eliminación.
- Condiciones que afecten al sistema nervioso central como parkinson, temblores crónicos, epilepsia, esclerosis múltiple o ataxia.
- Alteraciones psiquiátricas como esquizofrenia, trastorno bipolar, depresión mayor, crisis de pánico o de angustia, trastorno de estrés postraumático.
Estas condiciones y patologías suponen la eliminación automática del proceso selectivo, al implicar que la fase de concurso no ha sido superada.
¡Prepárate para conseguir tu plaza en prisiones!
La Resolución de 18 de mayo de 2021 recoge todos los detalles sobre las pruebas médicas y exclusiones que hay que tener en cuenta para preparar la Oposición de Ayudante de Instituciones Penitenciarias. Son 900 las próximas plazas anunciadas, ¡no pierdas la oportunidad!
En CEAC Oposiciones te ayudamos a conseguir tu plaza con nuestro Método Avanza. Que no te asuste la metodología a distancia, queremos ayudarte a conseguir tu plaza fija por lo que nuestra metodología está creada por expertos en pedagogía que te apoyarán en todo el proceso preparatorio. ¡No lo dudes y ve a por un puesto fijo!